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Consultora en temas de Inteligencia Económica y Estrategia.

jueves, 26 de enero de 2012

Este es mi Deseo para Todos: más Voluntad y menos corrupción pa'l 2012....


Para poder mejorar los niveles de vida de nuestra población, son necesarios cuatro elementos claves: Una estrategia, un mecanismo claro de implementación, capacidad para realizarlo y voluntad. Como país hemos trabajado duro en los tres primeros: tenemos una Estrategia Nacional de Desarrollo, estamos trabajando en la elaboración de las tácticas de implementación y contamos con capital humano interno y externo para hacerlo.  La gran incógnita es, tenemos la voluntad para hacerlo? Muchos indicadores apuntan a la falta de voluntad "real" como el principal obstáculo para mejorar nuestra calidad de vida.

La voluntad no es "querer que se pueda" como dice la canción. Voluntad es enfrentar cualquier obstáculo que ponga en riesgo nuestro objetivo. Y el principal obstáculo que han tenido nuestros gobiernos es sin lugar a dudas la corrupción. Nuestra falta de voluntad se refleja en la tolerancia que tenemos a la corrupción. Siempre comparo la corrupción con la frase: "Quítate tú pa ponerme yo"...y sí la naturaleza humana es egoísta, solo que cuando el egoísmo rompe las leyes, y condena a la pobreza y al sufrimiento a muchos dominicanos, deja de ser egoísmo y se convierte en crimen.  Y no me refiero solamente a la corrupción del sector público, porque gran parte de ésta existe porque el sector privado la alimenta.

La corrupción es fuente sin lugar a dudas de inestabilidad macroeconómica a mediano plazo. La corrupción incrementa el déficit gubernamental mediante un incremento de los gastos del gobierno, una reducción de los ingresos disponibles para gastar, y un incremento en la ineficiencia del gasto. Este déficit se traduce en aumento de deuda y por ende que a futuro se tenga que destinar más para el pago de deuda y menos para mejorar la calidad de vida, la equidad y la productividad. Veamos cada elemento paso a paso.

La corrupción incrementa el gasto público. Son inumerables los mecanismos existentes que incrementan el gasto, me voy a limitar a citar algunos: Existencia de nóminas abultadas, cobros de comisiones exageradas, contratación de suplidores relacionados a los tomadores de decisión, entre otros.  Algunos argumentan que las nominas abultadas constituyen un mecanismo de redistribución de ingresos y hasta un tipo de gasto social.  El problema es que ya tenemos esos mecanismos de manera explícita y muchas veces los beneficiados no reciben el dinero o francamente no se encuentran en una situación de riesgo económico.  En cuanto a las comisiones, las mismas generan que los suplidores carguen un precio superior por la realizacion del servicio, y al no poder ser compensadas este incremento en el precio es todavía mayor para compensar por el itbis e ISR adicional que generan.  Todo esto es claramente un desvio de nuestro esfuerzo hacia personas, que no son necesariamente los más pobres.

La corrupción aumenta la ineficiencia. El analisis anterior asume que cualquiera que sea el gasto, el mismo es producto de un analisis de las prioridades sociales y económicas del país.  El problema es que la corrupción se materializa muchas veces en la ejecución de proyectos que no tienen nada que ver con estas prioridades, pero benefician a unos pocos.

La consecuencia de todo lo anterior es deuda, deterioro de la distribución de la renta con pobreza, inseguridad y más corrupción, sobre todo privada. La corrupción es una animal voraz, que aumenta con el tiempo.  A medida que el gasto por corrupción se incrementa, es necesario buscar recursos adicionales para cubrir los gastos recurrentes del Gobierno.  Adicionalmente, un gasto ineficiente no hace posible el incremento de la productividad y con ello no tiene un impacto en el incremento de los ingresos. Es necesario incurrir entonces en deuda (que aumenta los gastos de intereses) o en aumento de impuestos.  El aumento de los impuestos, cuando no se percibe ganancias del gasto publico, incentiva  la evasión, desincentiva  la inversión privada y el empleo, y se traduce es una menor recaudación.  El desempleo y poca oferta de servicios sociales de calidad, provoca delincuencia y deterioro de la calidad de vida de los más pobres, lo que a su vez provoca menos inversión privada y más gasto publico en seguridad y en salud terciaria (como lo es accidentes, enfermedades graves, etc..).

Este es mi deseo para todos: Mas Voluntad para mejorar la calidad de vida y una mejor Economía Para Todos.